Ecología y turismo.
Con el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero y la contaminación de la atmósfera, la ecología se está convirtiendo en un tema candente que explorar, si no fundamental. ¿Sigue mereciendo la pena viajar? ¿Y cómo se toman? ¿Qué cifras hay detrás del turismo y la ecología? En este artículo, como nos gusta hablar de ideas preconcebidas, echamos la vista atrás a viajes locales y otros para centrarnos en este tema.
Ante el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, la industria del turismo parece ser la explicación perfecta del calentamiento global. Los aviones, los vehículos y las fábricas son los tres principales contaminantes. El examen de las cifras sitúa el índice de contaminación de los aviones en el 8%.
El sector de los combustibles y la energía es el más contaminante del mundo. Representa casi la mitad de las emisiones de gases de efecto invernadero, con un 72% en 2022. El sector incluye la calefacción (con carbón o energía nuclear), la industria y la extracción de petróleo. Este sector se utiliza en la vida cotidiana, en los sistemas de trabajo y desempeña un papel importante en el confort de oficinas y fábricas. Nos gustaría subrayar que esta definición no tiene en cuenta el uso de ordenadores portátiles y tecnologías, ya sea en la oficina o en casa. La tecnología y los ordenadores constituyen un ámbito aparte del gasto energético.
La segunda fuente de contaminación es el sector agrícola, más agresivo con el suelo que con el aire. La agricultura supone una doble carga para la factura ecológica global: por un lado, la práctica agrícola consume una enorme cantidad de agua y libera mucho metano, y por otro, ensucia profundamente la tierra y exige una deforestación extensiva. Sin embargo, la agricultura es radicalmente beneficiosa para la especie humana como ser vivo, por lo que es fuente de reflexión para la ecología y el turismo, punto que veremos más adelante en el artículo.
La tercera fuente de contaminación es la industria de la moda, responsable de una décima parte de las emisiones mundiales. Aunque no toda la ropa es respetuosa con el medio ambiente, la propagación incontrolada de la «moda rápida» coloca a la industria en esta situación. Esta práctica fomenta la producción de residuos nocivos y genera ropa pobre y más contaminante.
La cuarta fuente de contaminación, ya mencionada al principio del artículo, es el transporte. El transporte es una fuente importante de contaminación. Los principales contaminantes son los aviones, los barcos, el transporte público y los vehículos. Los motores de transporte son todos los motores que ayudan a desplazarse del punto A al punto B. Los cohetes no son un medio de transporte.
La quinta fuente de contaminación es la industria manufacturera y la construcción, que emiten 6.300 millones de toneladas de residuos medioambientales. Generan un 23% de contaminación atmosférica, un 40% de contaminación del agua y un 50% de residuos de vertedero. La construcción, a pesar de sus logros, sigue siendo un sector muy contaminante y afecta a varios ámbitos como el geológico, la depuración del agua, la contaminación atmosférica y la contaminación de las superficies.
La sexta fuente de contaminación es el sector de la distribución alimentaria, que es una de las principales fuentes de residuos alimentarios, con 3.100 millones de toneladas de residuos vertidos. Este sector incluye una enorme cantidad de residuos plásticos y, por poner un ejemplo, cada año el Reino Unido vierte 800.000 toneladas de plástico sólo en este sector.
La séptima fuente de contaminación es la tecnología y los ordenadores. Representa el 5,5% de las emisiones mundiales y debe mencionarse como una de las fuentes de emisión de gases.
Destino turístico local.
Se dice que la elección del turismo local evita la contaminación del transporte, reduce el comercio marítimo y ayuda al desarrollo de las empresas locales. Además de promocionar sus propios territorios y empresas locales, crea un verdadero atractivo, entretenimiento y proyección internacional para el lugar visitado.
En términos de ecología, el beneficio es aún más interesante: los destinos locales protegen la zona donde se asientan proporcionando infraestructuras sostenibles y ayudando a que la zona se conozca y documente mejor.
Los destinos locales pueden ser un lago, un cañón, un bosque, un patrimonio cultural, una montaña o cualquier otra cosa.
La etiqueta ecológica.
Según su definición, esta etiqueta garantiza el bajo impacto ecológico de un servicio o producto durante su ciclo de producción. Esta evaluación abarca desde la extracción de las materias primas, pasando por el diseño del servicio o producto, su transporte, su uso y, por último, su reciclaje.
De hecho, el turismo local se beneficia de la etiqueta ecológica por la proximidad que supone. Suele presuponer el uso de un pequeño ciclo de suministro de alimentos y materiales. Las autoridades competentes conceden la etiqueta ecológica una vez cumplidos los criterios para su concesión.
Agricultura local.
La agricultura es uno de los temas más candentes, desde la ecología, el rendimiento y los ciclos de producción hasta las subvenciones y la distribución. El tema está lleno de retos y el objetivo principal es la idea de utilizar menos energía para obtener la máxima cantidad de alimentos. Aunque no existe un método o una respuesta directa para alcanzar este ideal, se han identificado algunos modelos como agraciados. Plantar aquello para lo que la tierra es adecuada, o ajustar la tierra para plantar las mejores hortalizas para el clima y la gente. La agricultura local mediante el fomento de la agricultura de proximidad, la agricultura de entrega a pequeña escala, permite a las regiones alcanzar la autosuficiencia y desarrollar un ecosistema en la localidad.
Tipo de destinos locales que ayudan a la ecología.
En este artículo, porque nos gusta hablar de ideas preconcebidas como decíamos en la introducción, te hablaremos de destinos conocidos como destinos locales que son buenos para la tierra.
Piragüismo en lagos y ríos.
Ponemos este tipo de lugar en primer lugar, ya que es el destino definitivo donde puede relajarse y reducir su huella de carbono al mismo tiempo. Por lo general cerca de bosques o reservas, las cabañas, castillos, villas o casas cerca de ríos o charcas son buenas para el medio ambiente en general, preservan la vida animal y observan la tierra y sus limitaciones.
La principal amenaza es la masificación del lugar, que a veces puede crear una valoración errónea de las necesidades que requiere el terreno.
Museos y sitios urbanos.
Estos lugares están profesionalmente equipados para recibir a un público masivo y se adaptan a la normativa ecológica. Como vimos en el informe sobre las zonas más contaminantes del mundo, estos lugares no son interiores, así que no dude en visitar los museos y monumentos históricos que desee, pero es importante que tenga en cuenta que si puede hacerlo a pie o en autobús de gas, será mejor. También es importante que te lleves tu bocadillo, la comida suele ser muy cara cerca de los lugares turísticos y si has seguido las cifras que tenemos en el artículo estarías haciendo algo bueno por el planeta llevando tu propio bocadillo al museo o cuando visites un monumento histórico.
Parques y espacios verdes.
Los parques y espacios verdes son buenos para el medio ambiente, así que no dude en visitarlos. Puedes hacer footing, relajarte en el césped o pasear con tu pareja.
Esquí y montaña.
El esquí es la actividad más controvertida para la ecología, causa daños al medio ambiente y a pesar de la actividad deportiva que aporta, el esquí es perjudicial para la atmósfera. Si se practica con moderación, el esquí no es bueno para el planeta cuando las pistas están masificadas. Por eso, cuando vayas a la montaña, si no es para hacer senderismo, debes informarte para no esquiar sobre nieve no natural y dañar el medio ambiente.
Otros destinos.
Destinos.
Los destinos internacionales representan 1466 millones de llegadas en 2019 en todo el mundo, lo que significa que los viajes internacionales siguen siendo la parte principal de los viajes. Actualmente, los principales destinos son Oriente Próximo, Estados Unidos, Europa con Francia, Centroamérica, Asia y África.
Viajar a otro país significa volar y esto representa el 8% de la contaminación mundial. Eso es mucho, así que en este artículo te damos algunos consejos que hemos encontrado para reducir este impacto ecológico en caso de que quieras coger un vuelo de larga distancia.
Ve a un hotel o a un bar acogedor.
Las casas públicas o los alojamientos artesanales suelen estar regentados por lugareños o forasteros que viven allí, por eso lo recomendamos. Es más probable que las pequeñas empresas se integren en pequeños circuitos de producción de alimentos, comprando en el mercado local, trabajando con la agricultura local, y esto es bueno para la ecología a medio y largo plazo. Porque la agricultura local ayuda a la estructuración de la tierra, además, ayuda a pensar en los bosques con experiencia. Reduce los costes de transporte, crea una cultura del buen rendimiento y sinergias gracias a los esfuerzos de planificación urbana.
Prima verde.
La prima verde es el uso de tecnología verde para producir energía y vivir en general utilizándola.